Tras un mes desde el inicio de curso, nos encontramos ya a las puertas de noviembre tras andar en equilibrio por esa extraña línea que nos dibujó el mes de octubre en el que hemos ido acoplando las nuevas formas de desplegar la formación profesional junto con la disciplina sanitaria que nos exige el escenario de la pandemia mundial.
La imposibilidad de realizar actividades complementarias presenciales ni talleres prácticos con nuestros habituales colaboradores externos nos quita la esencia de la formación profesional pero nos aporta el reto de reinventarnos para dar valor desde dentro de ICEDE a la formación de nuestro alumnado.
De esta forma en la FP BÁSICA EN COCINA Y RESTAURACIÓN nos hemos uniformado y trabajado en puestos individuales dentro del taller extremando la higiene y precaución en cada actividad que hemos hecho, desde la recepción del género aportado por GM CASH ARANDA para la elaboración de nuestros primeros platos hasta el inicio de los trabajos en el huerto escolar de desbrozado, instalación de losetas y perímetro de plantas aromáticas cedidas por Viveros Núñez.
En el GRADO MEDIO EN CUIDADOS AUXILIARES DE ENFERMERÍA nos hemos mudado a un taller más amplio para mantener las distancias en el desarrollo de la práctica con el paciente adaptándonos a los nuevos protocolos de aislamiento que exigirán a nuestros futuros profesionales sanitarios.
En la especialidad de FP BÁSICA EN SERVICIOS COMERCIALES estamos adaptando las prácticas de almacenaje y disposición de productos en los espacios del centro y analizando de cerca la evolución del comercio local de nuestro entorno.
Y por último en la rama de ADMINISTRACIÓN Y GESTIÓN tanto de FP Básica como de Grado Medio estamos dando nuestros primeros pasos en la ofimática y disposición del nuevo simulador de Aula-Empresa para la práctica docente en escenarios simulados.
